v7.0

MALDITO ALACRÁN


Tiempos memorables aquellos, de sueños entre yaguas y tablas. Cómo olvidar el campo, la loma tranquila y fértil. Donde me acostaba a las siete de la noche y me levantaba a las seis de la mañana a dar de comer a los animales.


El agua lluvia provocaba un intenso sonido sobre las viejas yaguas de décadas, tratando de entrar y sólo algunas gotitas escasas lograban penetrar la ingeniería de genios sin estudios. Son bellos recuerdos que vienen a contentar mi memoria. 

¿Cómo olvido aquel día que cambiaron las viejas yaguas por aluminio? Eso fue pasar a "otro nivel".

Adiós yaguas, se acabaron las noches de insomnio y mezcla de lluvia. Cuando la señora no pegaba los ojos vigilando las gotas intrépidas que pretendía mojar las camas.

Todo el mundo de pies bien temprano, ayudando a quitar lo que quedaba en el techo, para poder colocar la nueva cobija. Y todos alegres, trabajando sin remuneración, sólo guineos con espaguetis y en la tarde espaguetis con moro de habichuelas rojas. Familiares, amigos, vecinos, hasta el que iba de paso ayudaba.

El convite típico. Por que así se trabajaba allá, y era tanto el regocijo de ayudar a otro con su casa, sus siembras, que el día pasaba entre cantos, anécdotas,y chistes, sin darse uno cuenta.



Y allá estaba yo, abalsando yaguas. Cuando de pronto sentí un fuerte punzón en uno de mis pies (en verdad no recuerdo bien cual de los dos fue). Es imposible olvidar eso. Qué grito más sublime el mío!, tampoco recuerdo cómo fue, pero si que grité y lloré, asustado y preocupado. Pues se trataba de un ALACRÁN, un rey temido, del que tantas cosas me habían dicho (verdades y tabúes locos).


Que una mordida no hace nada, pero si te pica te mueres. Que carajos sabía yo si era una mordida o una picada. Que tienes que hacer esto, aquello... Que no dejes que llegue primero que tú al agua, o si no te mueres... Pobre niño aquel, llorando más que por el dolor, por el miedo infundido e infundado.

Mucho tiempo ha pasado ya y seguimos andando por el mundo... No se si decir, infeliz alacrán o infelices hombres. Solo me queda decir: "MALDITO ALACRÁN"...

... pero bendito alacrán también, gracias a ti conservo ese recuerdo.