Imagen del bofetón que el alcalde Rodolfo Hernández le propinó al concejal John Jairo Claro en su oficina después de que este último lo acusara de corrupción. |
El alcalde de Bucaramanga, capital del departamento de Santander en Colombia, Rodolfo Hernández, es conocido por su temperamento vehemente y por su intolerancia contra todo lo que considera que propicia la corrupción. En más de una ocasión dicho temperamento le ha jugado malas pasadas, haciéndolo tener salidas en falso que lo han puesto en el centro de la polémica. La más grave hasta ahora, fue una bofetada que le propinó a un concejal en su despacho, por a que ahora deberá pagar una millonaria suma de 37.4 millones de dólares.
El hecho ocurrió el 28 de noviembre de 2018 cuando el concejal del partido ASI, John Jairo Claro Arévalo, acudió a la oficina del alcalde Hernández con una denuncia por supuestos hechos de corrupción en los que habría incurrido el mandatario. Esto desencadenó una discusión entre ambos donde los insultos fueron protagonistas, situación que escaló a tal punto que Hernández agredió al concejal con un bofetón en el cuello.
“Este fue un montaje de parte del Concejal y caí. Él me estaba pidiendo cita desde el martes pasado pero solo hasta ayer lo pude atender. Él llegó al despacho con un camarógrafo, yo no le vi nada de malo, pero en plena reunión empieza a agredir a mi esposa y a mi hijo con mentiras sobre lo de Vitalogic, pues en un momento de rabia me llené de ira y lo pegué un coscorrón. Lamento lo sucedido”, señaló el mandatario a medios locales en el momento de los hechos.
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