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GOLPE AL NEGOCIO NARCO EN LA VILLA 31: 18 BUNKERS CLAUSURADOS


Las viejas facciones de traficantes, como la banda de César Morán de la Cruz o la banda paraguaya de Los Sampedranos, son las que continúan manejando dealers y narcotráfico en el barrio

Santilli en la Villa 31 con personal del operativo.
Santilli en la Villa 31 con personal del operativo.

En los últimos días, la Policía de la Ciudad clausuró 18 puntos de venta de droga en la Villa 31, según confirmaron fuentes de la fuerza a Infobae, en una serie de operativos a cargo del fiscal Jorge Di Lello con el secretario Javier D’Elio bajo la firma del juez Ariel Lijo. Los blancos, que fueron amurados con ladrillos, estaban bajo el control de las viejas segundas líneas de diversas bandas históricas de la zona, según sospecha la Justicia, hombres alineados con la banda de César Morán de la Cruz, “El Loco”, uno de los capos más sanguinarios de la historia porteña, o Los Sampedranos, una facción de traficantes de origen paraguayo, con al menos 5 años de permanencia en la zona.

Con el tiempo sus líderes fueron allanados y encarcelados. “Ruti” Mariños, otro de los hombres fuertes de la zona con una larga historia de tráfico de drogas, fue condenado a diez años de cárcel a fines de 2019 por el Tribunal Oral Federal N°3. Sin embargo, la historia narco se reinventó, con nuevos capos como “El Groso” Ortigoza, un ex albañil capaz de facturar 3 millones de pesos semanales según anotaciones vinculadas a su banda. La Policía de la Ciudad lo había allanado en julio de 2019, en una redada para el Día del Amigo, que dejó 77 objetivos golpeados, 400 mil pesos incautados, 9 vehículos.

“El objetivo es la lucha contra la venta de droga y contra el narcotráfico, y el trabajo que hacen cotidianamente los hombres y mujeres de nuestra fuerza con la Justicia es lo que da el resultado de estos 18 centros de distribución cerrados”, agregó Diego Santilli, el ministro de Seguridad porteño, que recorrió la zona junto con el secretario de la cartera, Marcelo D’Alessandro.

Las tareas estuvieron a cargo del personal de la División Operaciones Norte 7 de la Dirección de Luchas contra el Tráfico y Venta Ilegal de Drogas, conjuntamente con la Comisaría Comunal 1, Prevención Barrial 31 de la Policía de la Ciudad y la Coordinación de la Dirección General la de seguridad Comunal e Investigación Criminal de la Secretaría de Justicia y Seguridad. Otros puntos ya habían sido clausurados en la cuarentena, con varios dealers detenidos.

Las filas dealer tuvieron movimientos fuertes en los últimos tiempos, luego de que el robo de un celular de una figura jerárquica en la vieja estructura de Morán de la Cruz disparara una ola de violencia interna. A fines del año pasado, Santilli mantuvo una reunión con Di Lello y su equipo, según fuentes en Comodoro Py. Se sumó a un proceso histórico, que comenzó en 2016 con la primera ola de allanamientos a las bandas de la Villa 31 con el plan de ocupar sus objetivos, un punto de inflexión en la historia local.

“Se trata de trabajar narcotráfico con visión política”, asegura un investigador histórico: “No solo tiene que ir la fiscalía, o Seguridad. Tiene que venir Desarrollo, porque el narcotráfico permea a mucha gente, por miedo o por conveniencia, porque tiene un hijo adicto amenazado o porque le guarda la droga al dealer por un vuelto. Cerrar un bunker es solo el primer paso”.

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