Para sacar 3 millones de onza de oro, la empresa minera necesitaría mover 8 mil camiones de 30 metros de rocas molidas. Esos 8 mil camiones de rocas bajarían desde Loma Romero hasta la presa de cola (posiblemente los Negros). Luego como ellos se proponer regresar las rocas a los túneles, los mismos 8 mil camiones regresarían de nuevo a Romero para ir sellando los túneles.
Cada tres volquetes de rocas (100 metros rocas molidas) equivale a 10 onzas de oro.
Ustedes se imaginan lo que implica moler 280 mil metros de rocas para ser transportada de ida y vuelta en 8 mil volquetes.
Ahora bien, ¿quién garantiza que serían sólo 3 millones de onza? ¿Cuántas décadas duraría este proceso? ¿Quién garantiza que se devolverá las rocas desechos ya contaminadas a los túneles? ¿Quién a garantiza que después de estar dentro de los túneles no se cambie de plan y se decida hacer la presa de cola para separar los metales encima de la presa? Siendo República Dominicana un país con falla sísmica, imagínense después de túneles subterráneos, estaríamos en riesgo de un gran terremoto.
Sobre el estudio de impacto
El estudio de impacto cuesta 5 millones de dólares (274 millones de pesos). ¿Quién lo pagará, sociedad civil, el Estado o la misma minera?
Obviamente que lo pagará la minera. Y el resultado no será distinto a los deseos de quien lo pague.
Siempre he sostenido que el único sector no vulnerable y en quien la sociedad de San Juan confía es en la Iglesia. No defraudar la confianza de la gente.
Una mina a cielo abierto es como tomar un cuchillo y apuñalara una persona. Y una mina a subterránea es como meterle el mismo cuchillo y extirpar los órganos internos. Es decir, la primera es matar de afuera hacia adentro y la segunda de adentro hacia afuera.
P. Moisés Corcino
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