Dinamarca ha implementado un impuesto pionero sobre las emisiones agrícolas, incluyendo el metano emitido por el ganado, para combatir el cambio climático. A partir de 2030, los agricultores daneses deberán pagar 300 coronas danesas (aproximadamente 40 euros) por tonelada de emisiones de metano, y este impuesto aumentará a 750 coronas (unos 100 euros) en 2035. Esta medida busca reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por el ganado, especialmente vacas y cerdos.
El Acuerdo Tripartito Verde, anunciado en junio, es el resultado de una colaboración entre representantes gubernamentales, agricultores, la industria, sindicatos y grupos ecologistas. Además de reducir las emisiones de metano, el acuerdo incluye medidas para combatir la contaminación por nitrógeno y restaurar hábitats naturales.
Dinamarca espera que esta iniciativa sirva como modelo para otros países en la lucha contra el cambio climático.
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